Guía Experimental
Efectos, observaciones y opinión sobre la exposición con la marihuana
Después de haber reunido los requisitos necesarios para la “celebración” comenzamos a fumar. Un cristal morado como la base de ese pilar, la punta se encuentra hecha de arcilla, el lugar predilecto para colocar el tabaco y el sabor del cannabis.
Usualmente comienza con un mareo, los ojos pierden su objetivo en la vida y comienzas a ser llevado por el extraño pero natural abrazo de esa planta; los sentidos se agudizan, todos y cada uno de ellos, son aumentados y algunos parecieran ser distorsionados pero, yo prefiero pensar que solo perciben más de lo que realmente conocemos. Las ideas que cruzan ese lugar que ahora parece tan desértico no tienen precedentes, vuelas sobre un mar de pensamientos, tan profundo e infinito como la misma mente humana. No hay comparación. si tienes cuidado y te esfuerzas todo se vuelve especial, no hay ocasión similar a otra, todo lo disfrutas o al menos, lo percibes.
Vale, también tiene aspectos negativos, pero en lo personal solo puedo describir uno, pues es solo con el que he tenido experiencia. Algunas personas dicen que pueden ver cosas, terrores que van más allá de la comprensión humana, o sensaciones que infestan el cuerpo con nada más que negatividad, miedo, depresión, o ansiedad (quizás todas ellas). En mi caso, la experiencia me enseño que los efectos pueden depender de la forma en la que te sientes en ese momento; lo que demuestra tu cuerpo y lo que contiene tu mente.Además del Vómito.
No hay energía, no puedes mover ni una sola parte de tu cuerpo, sin que tengas la sensación de gastar enormes cantidades de ella. No hay ánimo para hacer, salvo mantener el cuerpo inerte y la mente vacía (usualmente para un momento de paz y meditación estas son condiciones muy positivas), pero no por mucho tiempo, el movimiento genera desequilibrio por lo que no es muy recomendable moverse bruscamente o en el mejor de los casos evitarlo, hay nauseas, mareos y dolor parcial en la cabeza y/o estómago, escalofríos, debilidad, fatiga. Si te mantienes lo suficientemente quieto, en una posición cómoda o en la que no resientas algún tipo de malestar, pierdes, y lo que esperabas de una posible “after-party” se convierte en un sueño profundo con alta posibilidad de “no recuerdo ni madres”.
Por último, cabe mencionar que en un estado notable de alteración puede que pierda el hilo de las conversaciones (“se me fue el pedo”), por lo que se recomienda que se mantenga la calma, respire profundamente, y comienza una nueva plática, atienda a la conversación actual de otra persona si se da el caso, o continúe con la guerra de miradas que dejó pendiente con aquella pared que ha comenzado a moverse de nuevo.
